martes, 25 de septiembre de 2012

17. Perpignan / Narbonne / Montpellier

Contemos.

3469 coches. 487 camiones, de los cuales 359 han cometido intento de homicidio imprudente. Por suerte puedo contarlo. 2 paises. 89 pueblos atravesados. 68 kilos de peso. 15 Kg de equipaje. 2 pinchazos reales. 4 pinchazos que podian haberse evitado. 10 jornadas completadas. Mas de 800 km. 50 centimos un melocoton frances. 2 semanas fuera de casa. 1 bici reparada. 1 objetivo por delante. LYON

Por fin en Montpellier. Parecia que la tramontana no queria que llegase (escribo sin acentos por que no se donde se encuentran en este teclado) 

Perpignan/Narbonne. Ayer realice uno de las peores jornadas por culpa de la impotencia de no poder avanzar. Y es que hay muchas carreteras que estan prohibidas a las bicis, y es complicado encontrar variantes sin dar un rodeo importante. Eso me paso al querer salir de Perpignan. Confiaba en que la Nacional estaria abierta a la circulacion de bicicletas, pero hay tramos en lo que no te deja, asi que tras dar varias vueltas y probar por A y por B, me desanime y pense en volver a la Gare (estacion) de Perpignan a coger un tren. De camino, me encontre con un cicloturista que estaba de vuelta a Espagna tras haber viajado a Suiza/Italia, y que casualidad que era espagnol, de Valencia (que me perdone porque he olvidado su nombre). Me animo a que fuera por la costam y asi lo hice. Finalmente di el rodeo y en seguida llegue a Santa Maria del Mar, justo donde lo habia dejado la jornada anterior. Me sentia mal porque son muy liosas las calles, y mas si te metes en urbanizaciones de playa. \di vueltas, muchas, y poco a poco fui avanzado en el mapa. Lo mejor imagenes como las que adjunto, de paseos ciclables entre el mar y los estanques. De este modo, y tras muchos kilometros llegue a Barcares y Sigean. Empezaba a chispear, pero todo quedo en un amago. Todo el dia habia sido nubloso, y tenia el presentimiento que era tarde, parecia que iba a oscurer. la Verdad es que mire el reloj y no eran mas que las 14.30. Estando en Sigean, ya me anime a llegar a Narbonne. Una carretera nacional permitida para bicis, pero con un arcen minimo, donde los coches circulaban a 100km/h. 105 km me separaron Perpignan de Narbonne, cuando estan mucho mas cerca.
 ANECDOTAS. Buscaba lugar para dormir, pues hacia tiempo de tormenta. Se me ocurrio conectarme a internet desde el portatil de un chico que estaba en McDonalds, y desde alli aproveche a mandar solicitudes de CouchSurfing, donde hay gente que ofrece su sofa/cama. habiendolas mandado fui a buscar por si acaso un albergue barato, acabando en el albergue para jovenes. Estaba cerrado!. Intente forzar la puerta porque no me lo creia. De ese alboroto qu e monte salio un chico hablando en un frances extragno, y tan extragno que era espagnol, precisamente de Zaragoza. Su nombre es victor y agradezco su ayuda para conectarme a internet y conseguir casa. Y asi fue, tenia un mensaje respondiendo a una de esas solicitudes que hace 1 hora mande, Acudi a la direccion dada, y alli estaba Laurent esperandome. Me preparo la cena mientras me duchaba, y el descanso en un buen colchon estaba asegurado.


Narbonne/Montpellier. Se preveia una jornada larga de como minimo 100km, asi que temprano me he puesto a pedalear. Nada que ver con la salida de Perpignan, esta vez eran aceras anchas, entre plataneros y paisajes de vignas. En contra, el viento, un viento muy fuerte y variable. Rodaba a una media de unos 30 km/h y pronto he llegado a Beziers, desde donde he cogio el Canal du Midi, muy recomendable, para llegar a Agde. El gran momento del dia ha llegado cuando dirigiendome a Sete el permiso para ir en carretera se ha terminado, para desviarme por un carril ciclable paralelo a la costa.  He para a respirar, a relajar. Una playa fina compuesta por numerosas conchas desgastadas. Una playa muy extensa y tranquila. 
De vuelta a la faena se me ha torcido el dia. Queria darle mas presion a la rueda trasera cuando de repente se ha abierto la camara!!!. Debo ser demasiado torpe, porque soy horroroso cambiando ruedas. Si no las pellizco....gracias. despue de una hora probando, sudando, suspirando.. he continuado viento en contra hata Montpellier, donde he vuelto a pinchar la rueda trasera. Caminando, y gracias a mi memoria, he dado con la casa de Arnau, o Arnito como le solemos llamar. Una velada tranquila, un buen vino y pasta con pavo y leche de coco. Desde aqui mis mas sincera gracia, por la cena y la compagnia. Ahora me toca  centrar la rueda y a dormir, que magnana toca dia largo... espero dormir en Avignon.

Un abrazo a todos.

1 comentario:

  1. Hola raul!
    Nos alegramos muchisimo de todas las experiencias tan alucinantes que estas viviendo. Que sepas que estamos contigo y que nos mantenemos informados por aqui.
    Mucho ánimo y un abrazo enorme.
    Iván y Cristina

    ResponderEliminar